Hoy en día, los ataques que afectan la infraestructura tecnológica de las empresas son cada vez más comunes. No se trata solo de grandes corporaciones: las pequeñas y medianas empresas también están en la mira. En un mundo globalizado y completamente interconectado, cualquier organización —sin importar su tamaño— puede convertirse en un objetivo.
¿Te imaginas un solo día sin acceso a tus datos, sin poder comunicarte con tus clientes o con tus sistemas paralizados? Eso es exactamente lo que está en juego cuando hablamos de amenazas digitales a las infraestructuras críticas.
En este articulo te enseñamos cómo estar alerta y qué medidas puedes tomar para prevenir una situación como esta antes de que sea demasiado tarde.
Cuando hablamos de infraestructuras críticas, nos referimos a todos los sistemas y servicios que permiten que una empresa funcione con normalidad. Esto incluye desde la red eléctrica, los sistemas de telecomunicaciones y transmisión de datos, hasta el almacenamiento en la nube, donde muchas empresas alojan su información y respaldos más valiosos.
Por ejemplo, si tu empresa utiliza la nube para guardar documentos, gestionar operaciones o hacer copias de seguridad, entonces estás dependiendo directamente de una infraestructura crítica.
Por eso es fundamental que te hagas estas preguntas clave para evaluar el nivel de exposición y protección de tu infraestructura tecnológica:
Si tu respuesta es un SI, Entonces ya estás conectado y vulnerable a este tipo de estructuras.
Un ataque a una infraestructura crítica no solo afecta a la organización que la gestiona. También puede interrumpir operaciones empresariales, provocar la pérdida de datos sensibles, e incluso dañar la reputación de los negocios afectados.
Algunos escenarios :
Debes validar que tu proveedor de TI cumpla con altos estándares de seguridad, ya que esto será clave para fortalecer la protección de tu empresa. Un buen proveedor no solo te ayuda a mitigar el impacto de posibles ataques, sino que también se convierte en un aliado estratégico para tu departamento de seguridad.
Juntos pueden construir una infraestructura sólida y proactiva que te permita anticiparse a los riesgos del día a día, y responder de forma rápida y efectiva ante cualquier incidente.
Haz una lista de los activos que no pueden fallar: tus servidores, tus bases de datos, tus servicios en la nube. Saber qué es crítico es el primer paso para protegerlo.
Evita que todo esté conectado con todo. Separar los sistemas más críticos del resto puede frenar a un atacante.
Sí, lo sabemos: a veces da pereza actualizar. Pero muchas amenazas aprovechan fallos que ya tienen solución, solo que no aplicaste el parche a tiempo.
Hoy en día existen herramientas que te alertan ante comportamientos sospechosos. No se trata solo de detectar, sino de tener un plan claro de qué hacer cuando algo va mal.
Muchos ataques empiezan con un simple clic en un correo malicioso. Una empresa entrenada es una empresa más segura.
Asegúrate de que tus proveedores tecnológicos también cuidan sus sistemas. De nada sirve que tú hagas todo bien si ellos son una puerta abierta al ataque.
Un proveedor confiable no solo ofrece tecnología; también te ayuda a mitigar riesgos, mantener la continuidad del negocio y proteger lo más valioso: tu información y tu operación.
En Octapus a través de nuestro servicio de nube, te ayudamos a fortalecer la seguridad de tu infraestructura, garantizar la disponibilidad de tus datos y responder ante amenazas digitales de forma efectiva.
¿Listo para proteger tu infraestructura y dar el siguiente paso en ciberseguridad?